Transcripción
(El video del encuentro está al final de la publicación)
El equipo del Gabinete de Infraestructura, a través de la Universidad Popular de Invierno 2025 y organizada por la Multisectorial Federal de la República Argentina, realizó el miércoles 13 de agosto el Panel titulado: “Infraestructuras, sus redes en crisis” con panelistas que son referencia a nivel nacional e internacional, y del que a continuación presentaremos la transcripción y los consensos a los que se arribó.
Con la coordinación de las compañeras María Rosa Filliponi y Celmira Esther Rey, y la coordinación general del secretario de la Multisectorial Federal, el compañero Pablo Sercovich, contaremos, además, con la participación especial de lxs panelistxs Juan Larrea (Ing. en Electricidad), Bruno Capra (Ing. Electrónico), Hugo Alberto Varela (Ing. en Construcciones y Vías de Comunicación) y Celmira Rey (Dra. en Geografía), quienes nos darán a conocer la realidad que pone en riesgo derechos imprescindibles que garantizan la vida del pueblo así como también algunas propuestas válidas de resistencia y rescate.
El encuentro partió de los consensos alcanzados en la Universidad de Verano 2025 (que se desarrolló desde la sede argentina de FLACSO), y su eje vertebrador comprende el comentario y desglose del contexto político, social, económico y el relativo a las políticas llevadas adelante por el actual gobierno libertario, que a todas luces está conduciendo a la Argentina a la ruina.
Como es característica de la Multisectorial Federal, los paneles funcionan a manera de instancias de debate abierto y federal, que articulan saberes técnicos, militantes y territoriales, y que alimentan la producción programática de cada equipo temático de su Gabinete.
Presentación del Panel de Infraestructura – Apertura por María Rosa Filliponi
Esta presentación forma parte del programa de la Universidad Popular de Invierno 2025 de la Multisectorial Federal de la República Argentina, que organiza una serie de paneles y talleres virtuales con participación federal durante los meses de agosto y septiembre. Estas actividades abordan temas de interés y actualidad para el pueblo argentino, especialmente en el marco de la actual crisis social, económica y cultural, respondiendo a la necesidad de construir saberes de manera colectiva.

En este caso se tratará el tema de la infraestructura, entendida como las redes cruciales que garantizan la conectividad de servicios que sostienen de forma integral al país, tanto en sus actividades económicas, sociales y culturales. El término “infraestructura” proviene del vocablo que significa por debajo, y alude al sostén de la estructura general del país.
Subrayo: La infraestructura incluye los sistemas de energía, transporte y comunicación, elementos que hacen posible la vida cotidiana y el desarrollo de la Nación.
Este conversatorio abordará específicamente el estado actual de las redes de transmisión y distribución de energía eléctrica y de las redes viales.
El primer eje del panel se titula “Vialidad en crisis y el abandono de la obra pública: redes de rutas y caminos postergados.”
El segundo se dedicará al análisis del tarifazo eléctrico como forma de explotación social por parte de empresas privadas, buscando visibilizar los riesgos que estas políticas implican sobre los derechos esenciales que garantizan la vida del pueblo.
El objetivo es dejar planteadas propuestas válidas de resistencia y rescate, desde una perspectiva técnica y popular.
El primer disertante es el ingeniero Hugo Alberto Varela, especialista en construcciones y vías de comunicación, posgraduado en evaluación de proyectos y con una maestría en ingeniería vial.
Entre 1987 y 2008 se dedicó a la inspección de obras en rutas nacionales y provinciales; luego fue jefe de la Dirección de Vialidad Provincial del Chaco entre 2008 y 2014, y posteriormente administrador general de la misma institución desde 2015 hasta 2023.
Durante su gestión se desarrolló un plan de ampliación y pavimentación sin precedentes en la historia de la provincia del Chaco, tanto en rutas como en caminos y calles de la capital, Resistencia. Estos logros se dieron en el marco de una gestión peronista orientada a la expansión territorial y al acceso equitativo a la infraestructura pública.
Por su trayectoria y compromiso con la obra pública, el ingeniero Varela representa una voz experta para analizar la crisis actual de la vialidad argentina y la necesidad de recuperar el rol del Estado en la planificación y ejecución de las infraestructuras que sostienen la vida del pueblo.
Adelante, Hugo.
Exposición del Ing. Hugo Alberto Varela
Buenas noches a todos. En primer lugar, quiero agradecer la invitación de la Universidad Popular de Invierno para participar en estas charlas y analizar juntos la situación de la red vial nacional y provincial, un tema que atraviesa toda nuestra especialidad.

Podemos comenzar diciendo que la llegada de Javier Milei a la presidencia implicó el parate total y absoluto de todas las obras públicas con financiamiento nacional, así como de muchas obras con financiamiento de organismos multilaterales de crédito, como el BID, la CAF y el Banco Mundial. Esto es un verdadero desastre, aunque no nuevo: cada vez que interviene el Fondo Monetario Internacional se aplican las mismas recetas.
Hasta fines de 2023, después de la pandemia, la provincia del Chaco vivía un momento de plena ocupación en el sector vial: ingenieros, maquinistas, topógrafos, laboratoristas, todos trabajando a plena capacidad, con miles de obreros en obra. Lo mismo ocurría en muchas provincias del país. Se ejecutaba un plan vial fenomenal, que llevó progreso y desarrollo a toda la provincia, con el acompañamiento incondicional del gobierno nacional de Cristina Fernández de Kirchner y, luego, de Alberto y Cristina.
Durante ese período se construyeron autovías —como las de las rutas nacionales 11 y 16—, travesías urbanas y accesos que eliminaron puntos críticos de siniestralidad y mejoraron la circulación. Además, en 2022 comenzó la pavimentación de las rutas del Impenetrable, un plan de reparación histórica de 270 kilómetros para conectar poblaciones como El Sauzalito, Nueva Pompeya, El Espinillo y Fuerte Esperanza, donde predomina una población de pueblos originarios históricamente aislada.
Ese proyecto, financiado por Vialidad Nacional, fue paralizado en diciembre de 2023, sin intención alguna del actual gobierno de retomarlo. Quedará pendiente para cuando vuelva un gobierno popular, que pueda garantizar la llegada del pavimento y el progreso a esas comunidades.
Durante años, el Estado nacional impulsó un modelo de obra pública inclusiva: se pavimentaron miles de cuadras en ciudades grandes y pequeñas, se mejoraron caminos productivos y rurales, y se amplió la red vial con sentido federal.
Pero tras el triunfo de Milei comenzaron los despidos masivos: primero los obreros, luego topógrafos, maquinistas e ingenieros. Hoy, el sector está paralizado. No hay obras, no hay mantenimiento, y se está destruyendo la infraestructura básica del país.
Este gobierno, como los liberales de siempre, solo piensa en pagar al Fondo Monetario Internacional y destruir lo nuestro. Tal vez algunas provincias ricas, como Córdoba, Santa Fe, Mendoza o Neuquén, logren sostener obras con fondos propios; el resto no podrá ni mantener su red vial.
Lo que están haciendo con Vialidad Nacional es un daño irreparable. Desde su creación en 1932, el organismo fue clave para el progreso de cada provincia, conectando capitales, puertos, aeropuertos y pasos internacionales. Las rutas y caminos construidos por Vialidad Nacional llevaron desarrollo, producción y turismo a lugares antes aislados.
Además, Vialidad siempre colaboró con las provincias para ampliar sus redes, repavimentar rutas y formar cuadros técnicos. Sus profesionales fueron de los más capacitados del país, y su aporte permitió grandes obras históricas como los puentes Zárate–Brazo Largo y Chaco–Corrientes, o el túnel subfluvial Santa Fe–Paraná.
Hoy, los trabajadores de Vialidad Nacional resisten la destrucción del organismo. El presupuesto anual necesario ronda los 2.000 millones de dólares, pero el gobierno lo niega mientras fuga esa misma cantidad en pocos días.
La estrategia oficial busca concesionar los tramos más rentables, multiplicar peajes y, luego, transferir las rutas nacionales a las provincias sin recursos para mantenerlas. Esto equivale a condenar a la infraestructura al abandono y agrandar las desigualdades regionales.
Frente a esta situación, debemos pensar el futuro. Es urgente fortalecer nuestros cuadros técnicos, debatir, planificar y trazar un Plan Nacional de Integración Vial, en coordinación con las vialidades provinciales, las universidades, las cámaras empresarias y todos los sectores involucrados.
Si no elaboramos nuestra propia propuesta, cuando vuelva un gobierno popular corremos el riesgo de que las grandes consultoras internacionales impongan sus planes llave en mano, como ocurrió con las PPP de Macri.
También debemos trabajar en una nueva Ley de Obras Públicas que garantice transparencia, competencia y evite la cartelización. El sobrecosto de la corrupción drena los recursos del pueblo.
Y sobre todo, debemos prepararnos para una gran explosión de obra pública: vial, energética, habitacional e hídrica. La reconstrucción del país dependerá de eso. La obra pública tiene un efecto multiplicador que impulsa el trabajo, la producción y la dignidad.
Por último, quiero pedirles que militemos y trabajemos para convencer a cada compañero y compañera de que este gobierno neoliberal debe irse cuanto antes. Tenemos que estar preparados para, desde el poder, reconstruir la infraestructura, recuperar el Estado y sentar las bases de una Argentina con justicia social, desarrollo y soberanía.
Intervención María Rosa Filliponi – Agradecimiento al Ing. Hugo Alberto Varela
Excelente exposición del ingeniero Hugo Alberto Varela. Muchísimas gracias, Hugo.
Nos has transmitido una enorme energía en todo aspecto. Describiste la situación con claridad, pasión y profundo patriotismo, algo que hoy nos hace mucha falta.
Tu compromiso y tu palabra nos contagian fuerza para seguir luchando.
Queremos contarte que próximamente habrá talleres de infraestructura, así como talleres correspondientes a todos los paneles, que se desarrollarán durante septiembre y octubre, y quedás invitado a continuar trabajando con nosotros.
Debemos dar todo nuestro ímpetu para que el trabajo iniciado en los paneles continúe en los talleres, fortaleciendo la construcción colectiva y sumando cada vez más compañeros y compañeras a este proceso.
Gracias, Hugo, por tu ejemplo, tu entrega y tu claridad.
Dejo la palabra a Pablo para continuar con el trabajo y abrir el espacio a quienes quieran realizar preguntas o aportes.
Intervención de Pablo A. Sercovich
Gracias también a Hugo por tu exposición, y un agradecimiento especial a nuestro querido compañero Bruno Capra y al resto de los panelistas que se sumaron hoy.
Para nosotros es muy importante contar con la presencia de todas y todos ustedes.

El esfuerzo que realizan las coordinadoras y coordinadores de los distintos equipos encuentra sus frutos en estos encuentros, y también en las transcripciones y sistematizaciones que se elaborarán desde cada equipo, recogiendo estas miradas para que los talleres —como bien explicaba María Rosa— puedan desarrollarse como espacios de diálogo, debate y construcción de consensos.
Estos consensos son hoy más necesarios que nunca, sobre todo para definir estrategias de intervención concretas en esta etapa, en este caso vinculadas al tema de las tarifas, un asunto muy sensible para el pueblo argentino, especialmente para quienes protagonizamos la batalla contra la dolarización tarifaria durante el macrismo.
Por eso, prestaremos especial atención a este panel, con la intención de que desde la Multisectorial Federal podamos poner a disposición de todas las militancias herramientas que fortalezcan la organización en los territorios.
Agradezco nuevamente a María Rosa, Celmira, y a todas las compañeras y compañeros coordinadores del equipo de Infraestructura, por su compromiso y su trabajo constante.
Aquí nos quedamos atentos a escuchar y seguir aprendiendo.
Presentación de la Dra. Celmira Esther Rey – por María Rosa Filliponi:
Vamos a presentar a nuestra compañera Celmira Esther Rey.
Ella es Doctora en Geografía y Magíster en Gestión Ambiental y Ecología. Se desempeña como profesora de Geografía de la Población y es coordinadora del Grupo de Estudio en Movilidad, Servicios, Infraestructura y Territorio. Ha dictado numerosos cursos de posgrado sobre cuestiones ambientales y movilidad cotidiana de la población, en la Facultad de Ingeniería y Arquitectura. Además, ha realizado múltiples ponencias en eventos académicos y forma parte de la Red de Doctorados en Geografía de Universidades Públicas de la Argentina.
Integra la carrera de investigación y ha dirigido durante muchos años proyectos vinculados con su especialidad.
Actualmente, su trabajo se centra en el estudio de los movimientos cotidianos de la población y su relación con los conflictos que enfrentan los usuarios de la vía pública, en función de la configuración de la red viaria y la seguridad vial.
De este modo, seguimos complementando el abordaje sobre vialidad, rutas, conectividad y servicios, ahora desde la mirada territorial y ambiental que nos aporta la Dra. Celmira Rey.
Adelante, Celmira.
Intervención de la Dra. Celmira Esther Rey
Buenas tardes, espero que se encuentren bien. Agradezco la posibilidad de compartir este espacio y quiero destacar especialmente al ingeniero Hugo Alberto Varela, una personalidad significativa en nuestro medio.
Desde la Universidad Nacional del Nordeste, donde trabajo en el Instituto de Geografía, hemos mantenido lazos interinstitucionales efectivos con Vialidad Provincial, demostrando que es posible una producción conjunta entre distintos ámbitos y sectores para contribuir al bien común, especialmente al desarrollo del Chaco.

Mi agradecimiento, Hugo, por tu labor y por reconocer el valor de la geografía como disciplina fundamental para el estudio del territorio y la infraestructura.
Como geógrafa, quiero aportar algunas reflexiones conceptuales para comprender la complejidad de lo que abordamos cuando hablamos de redes estructurantes. No nos referimos solo a la infraestructura terrestre, sino también a las redes aéreas, fluviales y de telecomunicaciones, así como a sus puntos de conexión: puertos, túneles, aeropuertos. Estas redes son expresión concreta de la soberanía nacional.
Desde una mirada geográfica, podemos distinguir dos dimensiones de las redes: una extrínseca y otra intrínseca.
- La dimensión intrínseca se vincula con la movilidad humana, con el deseo de desplazarse para trabajar, estudiar, curarse o recrearse. Depende de las condiciones del ser humano —físicas, económicas, de accesibilidad y tiempo— y del derecho a circular libremente con seguridad garantizada por el Estado.
- La dimensión extrínseca se refiere a las condiciones materiales del territorio, al soporte físico sobre el cual se da la movilidad: caminos, características geográficas, infraestructura y servicios disponibles.
Argentina presenta una gran diversidad territorial —montañas, llanuras, mesetas— que condiciona el diseño de sus redes. La infraestructura vial y de servicios debe garantizar conectividad, accesibilidad y equidad.
En este sentido, es importante destacar que la red vial argentina está estructurada de forma radioconcéntrica, con eje en la región pampeana y la Capital Federal, extendiéndose hacia los bordes del país. Sin embargo, más allá de su diseño, lo esencial es su conectividad efectiva y su articulación con los centros nodales: los puntos donde convergen caminos, servicios y flujos económicos y sociales.
Siguiendo a Milton Santos, podemos decir que el territorio es la estructura sobre la cual se materializan los hechos de la vida de los seres humanos. Por eso, no puede existir justicia social sin justicia territorial.
Desde el paradigma del buen vivir y el bienestar, el Estado tiene la obligación de garantizar la libre circulación, la accesibilidad y la igualdad de oportunidades de desplazamiento. Cada viaje, incluso el más pequeño, implica planificación y derecho.
Por eso, al pensar el territorio en términos de redes, debemos comprenderlo como un soporte físico y regulador de la vida, que a su vez condiciona la movilidad y las posibilidades de desarrollo de las comunidades.
Las políticas públicas deben, por tanto, garantizar la seguridad vial, la accesibilidad y los servicios esenciales, pilares de los derechos humanos inalienables.
A modo de ejemplo, la provincia del Chaco posee una estructura de cuatro rutas nacionales principales:
- La Ruta Nacional 11, eje norte-sur, que conecta desde Rosario hasta el puente Loyola en Formosa.
- La Ruta Nacional 16, eje este-oeste, que une Corrientes con Santiago del Estero y Salta, cruzando el río Paraná por el puente General Belgrano.
El cruce entre ambas rutas, en Resistencia, constituye un nodo estratégico del corredor bioceánico del Mercosur, que vincula Paraguay, Brasil y Chile.
A ellas se suman las Rutas Nacionales 89 y 95, fundamentales para la conectividad productiva y portuaria del centro chaqueño con el puerto de Rosario.
Lamentablemente, estos proyectos fueron truncados con el cambio de gobierno, paralizando obras estratégicas como la prolongación de la autovía de la Ruta 16 y el segundo puente Chaco–Corrientes.
El resultado es un estado de deterioro y abandono de la infraestructura, especialmente grave en rutas productivas como la 89, afectando directamente a productores y comunidades rurales.
La reducción del gasto público impulsada por el actual gobierno mediante el DNU y la Ley de Bases —equivalente al 25% del PBI— es catastrófica para provincias como el Chaco.
Esta política desarticula la conectividad, profundiza el aislamiento y vulnera derechos básicos de accesibilidad.
Además, debemos interpelar a los legisladores que avalan estas decisiones y reafirmar la necesidad de un proceso de reconstrucción nacional conducido por un gobierno popular, capaz de desplegar una trama de infraestructuras estructurantes para el buen vivir.
Necesitamos consensos participativos y colaborativos que nos permitan reconstruir un sistema de movilidad con accesibilidad y equidad, donde todas y todos los ciudadanos puedan llegar al lugar deseado conforme a sus necesidades y proyectos.
Solo alcanzaremos la justicia territorial cuando sea inseparable de la justicia social.
Debemos aspirar a una ciudadanía plena, un bienestar colectivo y un Estado presente que garantice el derecho al movimiento, al trabajo y a la vida digna.
Muchísimas gracias.
Intervención de Pablo Sercovich
Muy importante la descripción que se ha hecho, especialmente en lo que refiere, por un lado, a la conectividad y, por otro, a la integración de las regiones productivas dentro de un proceso más amplio de exportación y activación económica.

Tal como planteaba Hugo, las infraestructuras están directamente vinculadas a la posibilidad de acompañar las iniciativas productivas, garantizando el desarrollo regional y la inclusión económica.
Esto me invita a reflexionar sobre lo que exponían los compañeros de la Universidad de Pueblos Originarios, en relación con la necesidad de acompañar las iniciativas productivas locales, reconociendo la diversidad territorial y cultural del país.
En cada panel vemos con claridad la interrelación absoluta entre las distintas áreas de trabajo, y la necesidad de sostener una construcción colectiva, donde las decisiones sobre infraestructura, producción, educación o ambiente formen parte de una misma estrategia nacional de desarrollo popular.
Intervención de María Rosa Filliponi
Simplemente quería destacar la importancia de la conectividad con nuestro Norte Grande, con Bolivia, Brasil y toda la región que forma parte del Mercosur.
Esa proyección estratégica de la Argentina hacia el Norte Grande quedó truncada, pero es el rumbo hacia el cual debemos volver a conectarnos.
Hacia el sur tenemos mayores limitaciones, pero el Norte nos vincula con varios países de América Latina, con los que compartimos historia, cultura y potencial económico.
La comunicación, la transmisión y el intercambio son fundamentales para el desarrollo de nuestras economías.
Tenemos en Sudamérica una riqueza enorme en recursos, capacidades y saberes, que nos permitiría abastecernos y complementarnos sin depender de otros mercados.
Por eso, la conectividad y la integración regional son claves para la soberanía económica y el bienestar de nuestros pueblos.
Intervención de Orlando Barboza
Compañeros y compañeras, voy a hacer una breve intervención.
Estamos hablando de un tema muy importante: las rutas, y quiero compartir mi experiencia porque vivo en una zona de frontera con Brasil.

En 2011 se inauguró el último tramo asfaltado en mi región fronteriza, una obra muy esperada. En ese momento participamos junto a autoridades brasileras en la planificación de un puente binacional, que aún hoy sigue pendiente.
También se hablaba de la Ruta del Grano y de la ferrovía de cien años, proyectos largamente esperados que finalmente se concretaron en parte.
La Ruta 14, que conecta Iguazú con Dionisio Sequeira y Bernard Gig, se terminó hace poco tiempo y fue un avance muy importante.
Sin embargo, hoy la preocupación principal es el mantenimiento de esas rutas.
Escuchando lo que mencionaban los compañeros de Vialidad, es fundamental que los representantes provinciales y los diputados nacionales no voten leyes que perjudiquen el financiamiento vial.
Hay que recordar que el 12% del valor del litro de combustible está destinado al mantenimiento de rutas, y un 7% a la parte ecológica, como cartelería y señalización.
Pero estos fondos no siempre se ejecutan ni se informan públicamente.
Por eso, estos paneles de formación son tan importantes: permiten que el pueblo conozca cómo se administran los recursos y pueda exigir que se cumpla lo que corresponde por ley.
Debemos exigir desde la política y desde los sectores populares que no se permita el desvío ni el saqueo de esos fondos destinados a las rutas nacionales.
Muchas veces el desconocimiento de la población hace que no se reclame lo que nos pertenece, y nuestros representantes votan sin saber, o sin asumir su responsabilidad.
Hoy, en espacios como este, aprendemos más política que en muchos partidos tradicionales, porque entendemos que la política real es la que se construye desde el territorio, con conocimiento y compromiso.
Tenemos que informar al pueblo y tomar decisiones territoriales colectivas, porque la infraestructura es un derecho, y su mantenimiento es responsabilidad del Estado y de todos nosotros como pueblo organizado.
Intervención de María Castillo:
Adelante, María.
Simplemente quería hacer un aporte. Como mencioné en el chat, la Constitución Nacional, en su artículo 75, establece que ante decisiones del Estado que afecten derechos fundamentales, tanto el pueblo como los gobiernos locales o provinciales pueden exigir y responsabilizar al Estado para evitar daños o retrocesos.
Esto es clave, porque la pérdida de conectividad o el deterioro de la infraestructura no son solo cuestiones técnicas, sino también violaciones de derechos.
La infraestructura no es un tecnicismo: es un derecho, porque gracias a ella podemos acceder al resto de los derechos —a la educación, la salud, el trabajo, la comunicación y la movilidad.
Debemos pensar que la accesibilidad, la conectividad y el abastecimiento son condiciones esenciales para la inclusión social.
Si se rompen las rutas, se rompen los derechos.
Ese era el aporte que quería compartir.
Celmira Esther Rey
Ahora vamos a dar lugar a Teudoro Ayala Quiñones, que levantó la mano también.
Sí. Después tenemos que pasar al otro panel para dejar al final un espacio de intercambio.
Teudoro Ayala Quiñones
Buenas noches, compañeros. Como expuso el compañero panelista anterior, el gobierno lo único que está queriendo es darle a las empresas la posibilidad de cobrar, eso sí es verdaderamente el gran curro. Siempre las empresas privadas no hacen obras; lo único que se dedican es a cobrar.

Lo mismo que están haciendo con ISA, que está toda la obra hecha: lo único que quieren es ponerse a cobrar. Igual con el transporte, como con Tren Argentino: solamente cobran, no hacen obras, destruyen todo y después viene el estado a arreglar.
En eso hay que enfocarnos en la campaña y tratar de convencer a la gente de que no estamos en contra de los privados, sino que las grandes empresas lo único que quieren es cobrar nada más.
Para el próximo gobierno, hay que prepararnos bien, porque históricamente, como con Néstor, se llegó por necesidad y casualidad, pero dentro de todo con sus errores y aciertos, hicieron bien para el país.
Bueno, eso es todo, compañero. Muchas gracias a todos.
María Rosa Filliponi
Vamos a dar lugar al segundo panel, que vamos a comenzar con el tema del servicio de energía eléctrica. El tema va a ser no al tarifazo eléctrico como explotación de la sociedad por empresas privadas, su análisis y verdades.
Va a comenzar con este tema el ingeniero Juan Larrea, que es un ingeniero electricista con orientación en potencia, hizo su posgrado en telecomunicaciones, es un ingeniero egresado de la UA y también fue legislador provincial en San Luis de los años 2013 al 2017.
Así que damos lugar al Ing. Juan Larrea.
Intervención de Juan Antonio Larrea:
Buenas noches a todos y a todas. Mi reconocimiento en especial a los y las organizadoras, pero también a las más de 50 personas que estamos hoy aquí dedicándole parte de nuestro tiempo a un asunto realmente muy importante.

Les hice llegar unos papeles que son un borrador, si hay alguien que se interesa un poco más o algunas cosas no aparecen en la locución, voy a introducir algunas modificaciones con relación al título.
El tarifazo no es lo central, es la consecuencia que espera la población y la producción, pero lo fundamental es fundamentar al pueblo trabajador en una política energética.
Los energéticos tienen una importancia histórica creciente desde 1907. Esto está relacionado con el tipo de país al que aspiramos y con dónde queremos vivir nosotros y las próximas generaciones.
Estamos en casi 3 millones de km² continentales y casi 1,5 millones de km² en la Antártida. A fin de año, la población rondará los 48 millones. El modelo de país actual no está pensado para esta cantidad de habitantes, sino para mucho menos gente. Esto genera que dos de cada tres personas ya estén sobrando para el modelo actual.
Lo que se está produciendo con la energía es un saqueo complementario: se saquea la riqueza natural y el trabajo que se produce. Los desocupados también son afectados, ya que consumen y pagan impuestos de alguna manera.
Conclusión central: el tipo de país que necesitamos es uno industrial, no solo basado en extractivismo agrícola, minero o energético. La energía del país debe ser utilizada para:
- Proveer trabajo,
- Industrializar el país,
- Crear condiciones de vida adecuadas, especialmente para la población trabajadora,
- Planificación para generar saldos exportables.
La matriz energética en los últimos 30 años muestra:
- Aumento del consumo de combustibles fósiles (gas, petróleo),
- Descenso de energía hidráulica (del 43% al 20%),
- Aparición de energías renovables (0% a 13%),
- Importancia de la energía nuclear, base científica y soberana.
Los contratos energéticos recientes (desde 2009, con desarrollo a partir de 2015) tienen privilegios que otras formas energéticas no tienen:
- Primero despachan,
- Mayor remuneración,
- Control en manos de empresas extranjeras o extranjerizadas.
El gas ha sido muy consumido y las fuentes convencionales perdieron capacidad hace años (ej.: Loma de la Lata, 2004). Esto ha generado importaciones y exportaciones problemáticas, especialmente durante olas de frío, con usuarios residenciales sin gas.
El tarifazo es solo complementario al saqueo energético:
- La tarifa organiza la remuneración de generación, transmisión y distribución.
- La mayoría del valor de la factura será para distribuidoras, no para energía.
- Se dolariza automáticamente, sin audiencia pública, aumentando tarifas.
- Se agregan fidicomisos y financiamiento de infraestructura a cargo del usuario.
Toda la política del gobierno prioriza exportaciones a costa de la vida y trabajo del pueblo, con objetivo financiero, sin control sobre el subsuelo ni la industria.
Conclusiones:
- Terminar con este gobierno.
- Implementar un verdadero plan de obras basado en la demanda proyectada.
- Conocer la curva de carga y los consumos necesarios.
- Dar prioridad a las energías según criterios técnicos, económicos y financieros.
- Tener empresas bandera nacionales a cargo de estos procesos.
Hay que terminar con este gobierno, implementar un plan de obras basado en demanda real, dar prioridad a energías estratégicas y asegurar que empresas nacionales manejen estos procesos y que sean viables para tener un país distinto. Muchas gracias.
María Rosa Filliponi:
Nos quedan 15 minutos para el Ing. Bruno Capra. Seguiríamos trabajando con esto y creo que se van a complementar con el ingeniero Hugo Capra, que también es un gran luchador, patriota y trabajador y tiene grandes conceptos. Así que vamos a hacer esto más rápido.
El ingeniero Bruno Capra es ingeniero en energías eléctricas, fundó la Cámara Industrial y pertenece al Instituto de Energía Calabrina Ortr, que es el grupo que le da batalla al río Paraná y a tantos otros movimientos productivos. Fue presidente de Sebratón, una empresa que tuvo que cerrar por el avance del liberalismo, y fue un importante defensor del compra argentino.
Hoy, como militante de lo nacional, nos hablará de defender la Argentina con nuestra Constitución, que tiene lo necesario para defendernos y que no estamos utilizando.
Así que, adelante Bruno Capra.
Compañero Bruno Capra:
Bueno, acá estoy.
Voy a hacer una presentación con algo de confusión deliberada para enganchar lo que dijeron todos y marcar las cosas que podemos cambiar. No critico a nadie, sino que tomo elementos de cada uno. Como mencionó María Rosa respecto a la Constitución, allí tenemos herramientas para cambiar todo esto y estoy frenético por salir del relato y empezar a combatir.

Uno cambia el ritmo que puede cambiar la sociedad. Tenemos millones de militantes, y necesitamos llegar a los millones. No les tenemos que contar lo que es “mi ley” porque unos la votaron y otros la odian. Por suerte los que lo odian se van haciendo más, pero eso no alcanza.
Hugo Variela habló orgullosamente de vialidad provincial. La vialidad nacional argentina generó la comunicación del país. En 1950, Estados Unidos enfrentaba un dilema estratégico durante la Guerra Fría: protegerse de un ataque costero. Como ellos eran un estado federal, cada gobernador construía caminos hacia su capital, dejando sin conectar los extremos. Argentina fue estudiada por ellos para hacer caminos que funcionaran en todo el país. De allí copiaron las grandes autopistas con capital estatal y concesión de peaje.
Los norteamericanos son claros en su cinismo: vigilan todo con visión soberana. Todos los elementos energéticos deben manejarse con visión estratégica y soberanía, porque las decisiones del Ministerio dependen del presidente. Un ejemplo: Argentina tiene una fuente energética gratis que no usamos, geotérmica. Perón en 1950 hizo un ensayo geotérmico en la cordillera; hoy tenemos cerca de 175 volcanes activos sin usar. También hay potencial en corrientes marinas y mareomotriz en la Patagonia, que podría aprovecharse. Sin embargo, seguimos importando energía y rifamos nuestra industria de turbinas.
En cuanto a las tarifas, participé en muchas audiencias públicas. El “no al tarifazo” sigue vigente, aunque Macri vetó la ley inmediatamente. Esto inició un sistema de espoliación: los dueños de la reserva argentina deciden cuándo extraer recursos según les conviene, no según la necesidad del país. Es un latrocinio disfrazado de mercado, un negocio de fuga de dólares.
La desorganización social está inducida. Desde la ley de jubilaciones hasta el ajuste en medicamentos, se ve un genocidio administrativo: muertos por acción del Estado sin que sea legal. La Constitución del 49 ya contemplaba atribuciones para los derechos humanos, incluyendo los económicos, sociales y culturales, que son universales e imprescriptibles. El dueño de los recursos naturales es el pueblo, pero se permite que privados acumulen riqueza a su costa. La nafta, por ejemplo, podría venderse a menos de la mitad de lo que cuesta hoy.
Estos derechos son universales y están firmados por 193 países. Tenemos aliados reales y potenciales en movimientos de derechos humanos. En Italia observé que los derechos humanos y la represión tienen enfoques distintos; la visión estratégica es indispensable para proteger soberanía y recursos.
En la Patagonia, los Catarí y otros actores privados construyen infraestructura como centrales eléctricas y hangares, anticipando posibles bloqueos de suministro. Esto refleja que todo el sistema tarifario y energético está condicionado por décadas de acumulación estratégica. La ley de inversiones extranjeras desde 1976 iguala las inversiones extranjeras a las nacionales, permitiendo la fuga de divisas y el crecimiento de deuda, que hoy alcanza más de 500,000 millones de dólares.
Mi propuesta es darle prioridad a la Constitución y aplicar sus principios. Por ejemplo, el agua y otros recursos naturales son propiedad del pueblo, y no pueden privatizarse. Esto puede trabajarse con un grupo de abogados y constitucionalistas, como Jorge Cholvis, para estructurar estrategias legales y sociales.
En resumen, necesitamos millones de argentinos compenetrados, aplicar los derechos económicos, sociales y culturales, y trabajar estratégicamente sobre soberanía, energía y recursos. Esto permitirá defender al país frente a la presión extranjera y proteger los intereses del pueblo.
Muy agradecido, muy agradecido.

María Rosa Filliponi:
Yo creo que Pablo va a cerrar este panel muy interesante y nos estimula a esta lucha que no hay que parar: atar un montón de cabos, anotar todo y ponerse a trabajar urgente, urgente, no hay más tiempo.
Me parece que todos los expositores nos han dado una riqueza increíble de todo esto que hace a la vida del país. Así que muchísimas gracias a todos, a Juan, a Bruno, a Hugo, a Celmira.
Le doy la palabra a Pablo, que creo que más que nadie estará entusiasmado con todo. Muchas gracias, María Rosa, simplemente para hacer un cierre vinculado con el registro del encuentro.
Pablo Sercovich:
No sé si me estás escuchando. Es un honor tenerte en este panel y por supuesto invitarte a protagonizar estos equipos de compañeras y compañeros que se dan a estos debates y al intento de poner a disposición del conjunto de las militancias estos intercambios.
Para cerrar por nuestra parte, decir que la Multisectorial Federal de la República Argentina tiene previsto continuar con esta actividad hasta mediados del mes de septiembre, después de lo cual se iniciarán los talleres de debate. Esperamos que todas y todos participen. Presentaremos sobre el final de estos encuentros algunas herramientas importantes para dar soporte y acompañamiento a las estrategias que cada uno de los espacios se proponga en función de esta próxima etapa.
Y esperamos que este proceso de articulación y organización nos permita el ejercicio de pensar en un proceso que no sea solo argentino, sino donde podamos trabajar mancomunadamente con otros espacios de la patria grande. Así que agradecer la presencia de todas y todos y quedamos, María Rosa, pendientes de tu coordinación para hacer una ronda de preguntas, mientras despedimos a quienes verán la grabación en YouTube. Muchísimas gracias por haber participado.
Consensos del Panel “Infraestructuras, sus redes en crisis”
(Universidad Popular de Invierno 2025 – Multisectorial Federal de la República Argentina)
1. Defensa de la obra pública y del rol del Estado
- Rechazo total a la paralización de las obras públicas por parte del gobierno nacional.
- Reconocimiento de la obra pública como motor del desarrollo, generador de empleo, cohesión territorial y justicia social.
- Necesidad de reconstruir Vialidad Nacional y fortalecer sus capacidades técnicas.
- Exigencia de un Plan Nacional de Integración Vial con enfoque federal, social y ambiental.
2. Infraestructura como derecho humano y condición de soberanía
- La infraestructura es un derecho del pueblo, no un privilegio ni un negocio.
- El deterioro de rutas, energía y conectividad constituye una violación a los derechos esenciales (educación, salud, trabajo, movilidad).
- La red vial, energética y de comunicación debe planificarse en clave de soberanía nacional y justicia territorial.
3. Rechazo a la privatización y concesiones
- Denuncia del proceso de concesión de rutas y multiplicación de peajes como forma de transferencia regresiva de recursos.
- Rechazo a la entrega de tramos rentables a empresas privadas y a la dolarización tarifaria.
- Propuesta de recuperar la gestión pública integral de la infraestructura energética, vial y de comunicaciones.
4. Enfoque técnico-popular para la reconstrucción
- Elaborar proyectos con participación de cuadros técnicos, universidades, gremios y militancias territoriales.
- Impulsar una nueva Ley de Obras Públicas que garantice transparencia y evite la cartelización.
- Crear un sistema integrado de planificación federal que articule transporte, energía, comunicación y ambiente.
5. Justicia territorial y equidad regional
- Reconocimiento del desequilibrio estructural centro–periferia en la infraestructura argentina.
- Necesidad de reconectar el Norte Grande y la Patagonia, priorizando regiones productivas, fronterizas y comunidades originarias.
- Principio rector: no hay justicia social sin justicia territorial.
6. Política energética soberana y democrática
- La energía debe servir al desarrollo nacional, no a la especulación financiera.
- Rechazo al tarifazo eléctrico y a la dolarización de los servicios públicos.
- Promoción de un Plan Energético Federal, basado en energías limpias, geotérmicas y nucleares con control nacional.
- Defensa de las empresas bandera y del conocimiento científico argentino (Carem, INVAP, YPF, etc.).
7. Soberanía constitucional y jurídica
- Exigir la nulidad absoluta de los decretos y leyes neoliberales que habilitan la desregulación y privatización:
- DNU 70/23 y 70/17
- Ley Bases
- Protocolo Bullrich
- Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones y convenios de cielos abiertos.
8. Construcción política y organización popular
- Llamamiento a fortalecer la organización popular y multisectorial para enfrentar la política de despojo.
- Propuesta de preparar desde ahora una etapa de reconstrucción nacional basada en planificación soberana y participación popular.
- Compromiso de continuar el trabajo en los talleres federales de infraestructura, sumando técnicos, militantes y territorios.

Tras la finalización de la Universidad Popular de Invierno en su 4a edición, comenzarán a desarrollarse los Talleres de cada área de Trabajo en el Gabinete Multisectorial, a partir del 15 de Septiembre.
La primera parte consiste en el trabajo sobre los Consensos sobre las exposiciones del panel
La segunda parte persigue Un Proyecto para tu comunidad.
Son espacios de diálogo para debatir y construir propuestas con metodologías participativas, análisis de contextos políticos y sociales e identificación de casos y proyectos.
Estos encuentros buscan ser espacios estratégicos para la proyección y construcción de Comunidad Organizada en articulación. La participación es federal, a través de la Modalidad virtual para garantizar la inclusión de todas las militancias del país y la producción colectiva en la que se pone de manifiesto la articulación de conocimientos académicos, técnicos y territoriales para cada proyecto con acompañamiento de la Multisectorial Federal y la supervisión metodológica de PPGA FLACSO.
La Universidad Popular de Invierno 2025 en su 4a edición convoca a la articulación, el fortalecimiento y la unidad popular, conjuntamente con el diseño de estrategias de acción para construir un proyecto de país como el que soñamos.
Principios Fundamentales de nuestra propuesta de trabajo:
La Multisectorial Federal de la República Argentina se basa en principios de inclusión, participación y respeto a la diversidad. Valoramos todos los aportes, ya sea desde un enfoque técnico, profesional o representativo de espacios específicos. Creemos que la diversidad de perspectivas enriquece nuestras discusiones y fortalece nuestras propuestas para una Argentina Justa, Libre y Soberana.
Áreas de Trabajo en el Gabinete Multisectorial
El Gabinete Multisectorial abarca una amplia gama de áreas que son fundamentales para el desarrollo integral de la sociedad argentina. Estos equipos temáticos de trabajo participativo de la Multisectorial Federal de la República Argentina tienen como objetivo:
–El monitoreo de las políticas públicas implementadas desde el 10 de Diciembre de 2023, el impacto del DNU 70/23, la Ley Bases, el RIGI y toda otra modificación jurídica o normativa con afectación en cada área, así como
–El desarrollo de propuestas que reflejen el horizonte deseado por las militancias articuladas por el bien común, construyendo en confluencia una propuesta política y la estrategia que la lleve a la victoria.
Tu participación activa es esencial para el éxito de esta iniciativa, por lo que extendemos una cordial invitación a sumarte a esta Cuarta Edición de Encuentros Participativos de la Multisectorial Federal de la República Argentina.
Organiza: Argentina en Red para la Multisectorial Federal de la República Argentina. Acompaña: CTA Autónoma – Universidad Popular de Invierno 2025.
Contacto para información sobre la Universidad Popular de Invierno:
Secretaría. Florencia. WP 1131987726

Dando continuidad a la formación y el debate que el Gabinete Multisectorial promueve desde su creación, esta Universidad Popular de Invierno 2025 es otro eslabón con el que se enriquecerá lo trabajado con nuevas miradas.
INSCRIBITE EN EL PANEL DE TU ÁREA:
Multisectorial Relaciones Exteriores, Multisectorial Desarrollo Social, Multisectorial Infraestructura, Multisectorial Salud, Multisectorial Educación, Multisectorial Género, Diversidad e Interseccionalidad, Multisectorial Cultura, Multisectorial Migrantes, Multisectorial Trabajo y Seguridad Social, Multisectorial Justicia y Derechos Humanos, Multisectorial Niñez y Adolescencia, Multisectorial Discapacidad, Multisectorial Ambiente y Territorio.
En Articulación Somos y Podemos
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